Boulevar Caseros se inauguró en 2007 y el pasaje se extiende entre las calles Defensa y Montes de Oca, entre los barrios de San Telmo y Barracas. De ambos lados del boulevar lucen las fachadas de coquetos edificios de época. El edificio el Schlinder sobresale, que es de 1910 y fue pensado como vivienda de los directivos ingleses de los ferrocarriles del sur.
Aunque el encanto de este rincón de Buenos Aires tiene que ver con sus barcitos, restaurantes “locales y new yorkinos”, o algún comercio de barrio que devela épocas pasadas. Es el caso de la eterna bicicletería Mila, que cumplió 60 años en la zona. O La parrilla La Popular (Avenida Caseros 500) la cual pone un acento bien porteño a la cosa, con los jugosos cortes de carne sobre los platos, banderines futboleros y las infaltables mesas de amigos comiendo juntos.
Acá el vegetariano no se quedará sin su lugar, también está el restaurant Hierbabuena (Avenida Caseros 454) con propuestas gastronómicas de lo más ricas y sanas.Y para coronarlo como el boulevar porteño “para no perderse”, los tilos que visten de verde el paseo junto a los aledaños Parque Lezama y el Museo Histórico Nacional.